Demanda selectiva
La demanda selectiva es una forma de comportamiento de compra en la que los compradores son muy exigentes con la calidad de los productos o servicios que adquieren. Están dispuestos a pagar un precio superior si eso significa obtener un producto o servicio mejor que el promedio. Esta forma de demanda se da principalmente en mercados en los que los compradores tienen un alto nivel de conocimiento sobre los productos que están comprando, como los de lujo, los productos de alto rendimiento, los productos electrónicos y los productos de alta tecnología.
La demanda selectiva se basa en la premisa de que los compradores están dispuestos a pagar un mayor precio si el producto o servicio ofrece características únicas que no se encuentran en otros productos o servicios similares. Estas características pueden incluir la calidad, la comodidad, la estética, la conveniencia, la durabilidad y la eficiencia. En el caso de los productos de lujo, la demanda selectiva también se basa en la exclusividad.
Aquí hay algunos ejemplos de demanda selectiva:
- Los compradores de lujo que están dispuestos a pagar un precio premium por productos exclusivos de diseñadores reconocidos.
- Los compradores de coches de alto rendimiento que están dispuestos a pagar un precio superior por un vehículo con un rendimiento óptimo.
- Los compradores de productos electrónicos que están dispuestos a pagar un precio premium por un producto de última generación con características adicionales.
- Los compradores de productos de alta tecnología que están dispuestos a pagar por productos con un alto nivel de innovación.
La demanda selectiva es una forma de comportamiento de compra que se da principalmente en los mercados de alto nivel. Para una empresa, es importante entender la demanda selectiva para poder ofrecer los productos o servicios con las características adecuadas para satisfacer las expectativas de los compradores exigentes.
Fuentes: